No soy un experto en la materia, mi experiencia es solo a nivel usuario.
Solo puedo decir que unos 50.000 Km al año dan para mucho. He visto de todo y en ocasiones cosas desagradables que se podían haber evitado.
Las estadísticas dicen que 3 de cada 4 accidentes con víctimas se deben a defectos en los neumáticos. Esto no quiere decir que tus neumáticos tengan ningún defecto, no se ven grietas, es posible que no estén cristalizados.
Pero cuantos más Km. se hacen más se degradan las prestaciones, es decir, las distancias de frenado, el agarre, el confort y la seguridad.
Según avance el kilometraje o la edad de las ruedas habrá que ir aumentando las distancias de seguridad y conducir con más anticipación, y cuando llueve, nieve o hiele, esto debería incluso doblarse. Las diferencias están ahí y conviene prevenir antes de tener que curar. Y eso último no siempre se puede.
Dado que la seguridad del vehículo se apoya fundamentalmente en los neumáticos, son un elemento de precisión que debe mimarse en su totalidad. Apurar los límites de las ruedas es una forma estupenda de convertir un coche hábil y eficaz en la barca de Chanquete.
Yo a los neumáticos les exijo el 100% de sus prestaciones en todo momento. Son los que me van a sacar de una situación embarazosa cuando un loco de esos que todos nos encontramos a diario se cruza en mi camino.
Por todo esto, no se a vosotros pero a mí no me gusta apurar los neumáticos y llevarlos a un estado terminal que es cuando aparecen los testigos.
Pd.
Hay una cosa que me tiene desconcertado y es que al ver mi coche en el conce pude comprobar que el treadwear de los Michelin es 240. Vamos, lo que es un neumático medio, ni duro ni blando.
Son 1.700 Kg de maquina los que tienen que soportar y por muy suave que lo lleves… No sé, 73.000 Km creo que son demasiados. ¿Has mirado la fecha de fabricación?
Saludos. Juanjo. Y perdón por el tocho.